Todos tenemos gustos distintos. Es obvio, en los gustos no hay nada
escrito. Hay personas que aman la
mermelada, yo no soy muy fanático de ella.
Existen personas que les encanta buscar a alguien mayor para hacer
“cuchi-cuchi” (Que en su mayoría carretea en el Tutix de Viña), como también a
algunos nos gustan menores, si se, si se, suena pervertido pero, ¿Qué querís
que le haga? Y como también hay hombres
que les gusta el pi…Mejor no hablar de eso.
La cosa es que si hacemos una investigación y comenzamos a buscar los
diferentes gustos que existen estaríamos en eso más tiempo de lo que estuvo
Hugo en la isla. Por eso vamos a hablar
de los gustos extremos, esos que no nos dejan dormir y nunca salen de nuestra
mente. Estoy hablando, pongan redoble de
tambores: De las adicciones. Malditas
adicciones que nos cagan la vida a veces, y otras veces hacen que nuestra vida
sea más divertida. Por ejemplo que me
pasa a mí con las series. Soy tan adicto
a ellas que después de llegar del carrete, sean las 2, 3, 4 o 5 de la mañana,
siempre tengo dos capítulos prendidos para ver alguna serie, a veces cuando
llego un poco entonado no alcanzo ni terminar la mitad de un capítulo porque me
quedo dormido, pero la intención es lo que vale. Y como acá hablamos de series y de sus
personajes, tenemos que analizar las diferentes adicciones que estos seres
creados por nuestros dioses guionistas han ido adquiriendo a través del
tiempo. Por lo que haré un top 3 de las
adicciones más brígidas en series, esas adicciones que son tan fuertes que nos
hacen pensar si también las consumiríamos si estuviésemos en ese lugar.
En
tercer lugar dejaré a un grande del cual ya hemos hablado: A nuestro querido
Gregory House. Viejo, inteligente, tira
pinta, bueno para la talla, doctor, tiene sus lucas…Es perfecto mujeres, ¿O
no? Lamentablemente no todo lo que
brilla es oro. Nuestro pobre Dr. House
tenía una adicción al “Vicodin”. El
pobre era adicto para aliviar un dolor en su pierna, que también lo tenía con
bastón y cojo. Bien cagado que estaba. En varios problemas esta droga metía al
célebre doctor, pero siempre ingeniosamente nuestro querido amigo se salía con
las suyas. Punto para Dr. House y porque
drogo y todo siempre nos sorprendió y nos hizo reír.
La
segunda adicción es una muy peculiar, por favor si alguien tiene esta adicción
vaya a ver un psiquiatra ahora mismo, es divertida verla en la televisión, pero
en la vida real es otra cosa. Es la
adicción de Dexter Morgan, este loco mata a la gente. No está tan mal porque mata a la gente mala,
pero igual es algo raro decir que necesitas matar a alguien, a menos que lo que
quieras matar es un vaso de piscola o roncola, eso es más entendible y es una
adicción un poco más divertida. Dexter
se queda con el segundo lugar porque sabe hacerla, es un cabro que zafa siempre
y nunca lo han pillado, los únicos que han descubierto su secreto tienen dos
opciones: O se quedan piola, o Dexter los mata.
Cuanto sabe este hombre. Segundo
lugar para Dex.
El
primer lugar se lo lleva la mejor de todas las adicciones, una adicción que te
lleva al toque con una mina a la cama o a las mansas volás: V de True
Blood. Weón, la sangre de vampiro en
True Blood te vuelve loco. Es cosa de
ver a Jason Stackhouse cuando se tomaba esa weá. Se iba en las volás raras de estar en una
granja acostado con una mina en pelota.
Cuánto sabe Jason. Pero igual
como todas las drogas, la V es mala, así que si un vampiro te ofrece de su
sangre, no la tomes…a menos que el vampiro sea tan sexy como Erick, ese loco sí
que es cabrón. Si él me quiere dar V y
bacilar conmigo, la hago al toque. Pero
bueno, este el primer lugar en el primer ranking del blog. Sí, vendrán más, así que seguiré escribiendo
para entretenerlos…yupi.
Pero
como todo ranking, siempre tiene que haber un Bonus Track, o sea todo el rato,
¿Qué estaba penando? Así que dejaré una
de las mejores adicciones como Bonus, la adicción que todos sufrimos pero hay
un personaje que la representa como los dioses: Homero Simpson y su adicción a
la cerveza, entre muchas más que tiene.
“Sin tele y sin cerveza, Homero pierde la cabeza.” ¿Cómo no nos vamos a
acordar de ese capítulo? Cuando hacen
una parodia del “Resplandor” y Homero es Jack Nicholson y trata de matar a su
familia porque en la mansión no había tele ni cerveza. Grande Homero, no podías no estar acá.
Esas
son las adicciones, unas son buenas y otras son malas, la cosa es medirnos, por
eso mismo yo dejo siempre 17 horas al día para ver mis series y el resto para
comer, dormir y a veces estudiar. Pero
ojo, de repente una adicción puede ser buena, o sino pregúntenle a Gannicus con
su adicción de meterse con las mansas minas.
Dudo que haya sufrido el pobre con eso.
Grande.