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jueves, 17 de octubre de 2013

Del Pre al Carrete y SUS ERRORES!

                Tus papás siempre te dirán que el trago es malo, pero nunca aceptaran que, tal vez, por un par de copas de más tú fuiste concebido y ahora ellos tienen el placer de tenerte como hijo o hija.  El copete puede ser malo de varias formas, o sino pregúntenle a Johnny Herrera, pero también ayuda a muchos en diferentes sentidos, o sino pregúntenle a Charlie Sheen.  Pero si hay unas personas que son muy ayudadas por las bebidas alcohólicas son los feos y las feas.  Esos ogros culiáos que después de un par de traguitos son más minos que el dueño de este blog…right?  Y es por el alcohol que te agarrar a ciertos Traucos por la vida.  Por eso, en nombre de la gente fea, un High Five algo arrepentido a todos los que hemos “cochineado” alguna vez.

                Cuando nos juntamos en los pres (Actividad realizada por jóvenes chilenos para llegar algo alcoholizados a sus respectivos malones) tenemos la intención de “prendernos”, por eso también incentivamos a que el farol alumbre unas cuarenta y cinco veces por noche.  Pero lo que en un momento parece adecuado, después nos juega en contra.  Las minas, por ejemplo, se juntan con sus amigas a tomar Absolut y copetes con colores maricones, y se ponen a hablar puras weas.  Pero el pre de la mina es más corto que el del hombre, porque las minas se parten arreglando a las 21:30 horas, se terminan de arreglar a las 22:50 horas (Si es que andan apuradas), luego viene el maquillaje, ese maldito maquillaje que le agrega un par de minutos más, por lo que se da por terminado el proceso de maquillaje a las 23:30 horas.  En ese momento una persona normal pensaría que la hembra está lista para salir a parrandear y tomar alcohol de manera estúpida como lo hacen todos los niños de quince años en Chile, pero no.  Ahora falta el último proceso que es el más agotador, cuando parten comentando sobre sus vestimentas.  Weón, si te demoraste dos horas en ponerte la wea y te quedo mal, es porque de verdad eres tonta, pero siempre la amiga tiene un comentario rebuscado para darte y hacerte cambiar de opinión, aunque estés más rica que Jennifer Aniston.  Si eso ocurre, la mujer se termina de arreglar a las 00:15 horas y ahora sólo tiene 45 minutos para poder hacer el pre con las amigas.  Y al sólo tener esos pocos minutos debe consumir su bebestible más rápido, por lo que se cura más rápido, por lo que sería más fácil que cometa un error, y ahí es donde entra el weón feo en esta historia, ya que ese weón feo se esfuerza en ser el error de la mina rica. 

                El weón feo toma, pero no tanto, porque debe tomar la cantidad suficiente para poder tener actitud, y también la suficiente como para no parecer un aweonado curado.  Con esa dosis el weón feo acecha durante toda la noche a las minas ricas, no la saca a bailar, sabe que su momento aún no llega, pero cuando la mina rica ya va por su tercer copete en la disco, y asumimos que se tomó unos cuatro en el pre, el Cuasimodo del carrete se acerca, como un caballero y la saca a bailar.  En ese momento la mina piensa esto: “Ya, si no me lo voy a agarrar… ¿Qué le hace el agua al pez?”  Y el Chucky piensa esto: “Está pasada a copete…a esta me la agarro.”  Es casi como si los weones feos sacaran a bailar a las minas con un Alcohotest, la weona que marca más grados de alcohol es la indicada para bailar con él. 
               
                 Y así es como de un pre con las amigas, una noche se transforma en la peor de su vidas, chiquiiiiillas.

                Pero el ritual del hombre para condorearse en la noche es diferente.  También este ritual parte con un pre, un pre completamente distinto al de la hembra.  El macho chileno se junta temprano, a las cinco de la tarde a tomar chelas, una vez que el aliento es fuerte y el bajón llega los diferentes machos del grupo se separan para dirigirse a sus hogares y alimentarse antes de salir de cacería.  El hombre se arregla en quince minutos, pero diez minutos ahí son para ir al baño y votar desechos tóxicos.  El hombre igual le puede preguntar a su amigo como se ve, pero la respuesta del amigo es un paipe en la cabeza y un: “Puta que eris maricón, weón.”  Cuando el macho chileno ve su reloj y se da cuenta que este apunta a las 21:50 horas, justo después de haber terminado de ver el deporte en las noticias, este llama a sus amigos para ver con quien comprar la promo “a medias” para el pre.  Una vez terminado ese importante trámite el hombre se dirige a comprar, acá la opción es difícil, ¿Qué compramos?  “Si es Alto o Mistral no nos queda pa’ comprar cigarros, pero si es Capel mañana iré con caña al almuerzo familiar.  Podríamos tomar vodka, no me dejará olor, pero igual es más caro.  Por otro lado está el ron, pero el ron deja CA – CAÑA (Si no saben que es la CA – CAÑA lean mi publicación de las cañas)”  Ese momento en que el hombre se pone a pensar con sus amigos y elige con que elixir se “motivará” en la noche.  Una vez tomada la decisión toda la manada se dirige al lugar de encuentro del pre.  Ya son las 22:35 horas y la primera piscola ya está acabando, son las 23:05 horas y el farol comenzó a alumbrar.  Cuando el reloj golpea las 23:56 horas ya hay un weón dando jugo y justo a las 00:15 horas estamos listos pa’ salir y no hacer fila en la disco. 
              
            Una vez que los borrachos llegamos, primero analizamos el ambiente, vemos que tantas minas hay y cuantos weones hay.  Si hay mucho hombre la wea está mala, si hay mucha mina está buena.  Una vez terminado ese análisis viene la etapa de ver cómo están las minitas.  Y como estamos curados, no están tan mal, sin embargo no partimos con las peores.  El curado siempre va a ir donde la más rica, para que nos de ese “No” tan innecesario de la noche, de ahí vamos bajando y bajando y bajando.  Entremedio tomamos más para armarnos de valor por si nos toca cochinear.  Y la fea al ver esto se acerca a su presa, ve que hay un weón ebrio siendo rechazado por todas, por lo que en algún momento tiene que llegar a ella.  Y cuando ese momento llega, la mina al toque te dice que si para bailar, pero al comienzo se hace la difícil, por alguna razón cuando estamos curados y la mina, sea rica o fea, se hace la difícil, nos calentamos más.  Es como: Challenge fucking acepted.  Y cuando la weona cacha que estamos lanzándonos tanto rato, por fin nos da la pasada, la weona prácticamente nos come.  Es brígido ver como las feas casi se atragantan dándote un beso.  Aprovechan todo lo que pueden ese momento, en vola cuando fue la última vez que les salió webeo en una noche. 

                Y así es como el hombre se equivoca.

                El pre y el alcohol son diferentes tanto para el hombre como pa’ la mujer.  Pero tienen una cosa en común, tanto al macho como a la hembra nos pueden llevar a cometer errores.  Mejor no tomen, amigos míos.  Sean sanos y…ni yo me la creo, consuman alcohol en grandes cantidades.  Jesús en la biblia siempre andaba tomando vino, y si, efectivamente, era tan bueno, el vino algo habrá tenido que ver.


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